En coincidencia con la cumbre del G7 en Italia, el Papa Francisco aprovechó para hacer su propia cumbre alternativa, una reunión de humoristas de todo el mundo, con un mensaje que tiene alcance global: el poder de la sonrisa.
En coincidencia con la cumbre del G7 en Italia, el Papa Francisco aprovechó para hacer su propia cumbre alternativa, una reunión de humoristas de todo el mundo, con un mensaje que tiene alcance global: el poder de la sonrisa.