Criado por monjas en un convento, desde pequeño fue tratado como una niña. A pesar de sentirse atraído por mujeres, continuó viviendo como “Sor Margarita”. Navegación de entradas Si Pete Hegseth tuviera honor, renunciaría La historia de una atleta que quedó paralítica y volvió a correr 12 carreras: “Mi discapacidad no descalifica mi propósito”