Su historia es conocida: fue recolector de residuos y estuvo preso. Jugó en el Ascenso, también en el exterior y en Instituto. Hasta que en la Academia explotó con una eficacia arrolladora. Navegación de entradas Gustavo Costas, cerebro y corazón del Racing campeón de la Sudamericana: “No somos millonarios, no somos la mitad más uno, pero somos distintos a todos” ACV: la enfermedad que genera más discapacidad se puede prevenir y cuál es la clave que falta para lograrlo