Un restaurante que se volvió punto de encuentro por sus platos abundantes y un ambiente de club de barrio. Cada fin de semana se llena y todos coinciden en lo mismo: hay una tortilla que no se olvida. Navegación de entradas “La invitada” de Emma Cline: Un thriller psicológico sobre el lujo y el desarraigo Thich Nhat Hanh y su enseñanza: cómo hacer felices a los demás también nos transforma