“¿Estamos predestinados a retroceder?”, se pregunta Timothy Garton Ash evocando la obra de Stefan Zweig, casi un siglo atrás, un alerta sobre las inquietantes tendencias que amenazan la paz y la democracia en la actualidad.
“¿Estamos predestinados a retroceder?”, se pregunta Timothy Garton Ash evocando la obra de Stefan Zweig, casi un siglo atrás, un alerta sobre las inquietantes tendencias que amenazan la paz y la democracia en la actualidad.