Miles de canes campan a su anchas en las calles y parques de la ciudad sin provocar el menor signo de inquietud entre la gente. Todos los perros llevan en la oreja un chip de color que es su carta de vacuna y esterilización. Navegación de entradas “Corazón Partío”: Un libro revela la cacería de homosexuales en la dictadura de Pinochet Los Pumas 7s se consagraron campeones en el Seven de Perth tras aplastar a Australia en la final