Si hay gente que se encariña con muebles antiguos, mascotas que orinan toda la casa o personas que después tildan de tóxicas, ¿qué tiene de reprobable un romance con una hermosa cafetera rodante?
Si hay gente que se encariña con muebles antiguos, mascotas que orinan toda la casa o personas que después tildan de tóxicas, ¿qué tiene de reprobable un romance con una hermosa cafetera rodante?