La polarización excluyente fractura el régimen representativo en un combate a todo o nada. Puede ser una estrategia exitosa desde el punto de vista electoral, pero dañina para obtener mayoría estables.
La polarización excluyente fractura el régimen representativo en un combate a todo o nada. Puede ser una estrategia exitosa desde el punto de vista electoral, pero dañina para obtener mayoría estables.