El litigio en Brasil contra el dueño de X y el arresto en Francia del creador de Telegram, exponen la línea que ciertos influyentes vértices del mundo virtual pretenden disolver entre la libertad de expresión y el deber de respeto a la verdad.
El litigio en Brasil contra el dueño de X y el arresto en Francia del creador de Telegram, exponen la línea que ciertos influyentes vértices del mundo virtual pretenden disolver entre la libertad de expresión y el deber de respeto a la verdad.