Hay quienes afirman que la agenda impuesta últimamente por Milei poseería dos defectos. Agita a un sector de minorías sociales en una coyuntura estival de muchísima calma. Y anticipa el juego de la polarización.
Hay quienes afirman que la agenda impuesta últimamente por Milei poseería dos defectos. Agita a un sector de minorías sociales en una coyuntura estival de muchísima calma. Y anticipa el juego de la polarización.