El principal sospechoso es un ciudadano guatemalteco de 33 años que viajaba en el mismo tren que la víctima. La Policía neoyorquina calificó el hecho como “uno de los crímenes más depravados que una persona puede cometer”. Navegación de entradas Los 5 animales más raros de Argentina y su importancia Transformá tus noches: la clave para una rutina que impulse tu éxito diario