Un ícono porteño desde 1930, fue testigo de la historia de Buenos Aires desde el auge del tango.Platos tradicionales con un toque contemporáneo, como los buñuelos de espinaca y el revuelto gramajo.
Un ícono porteño desde 1930, fue testigo de la historia de Buenos Aires desde el auge del tango.Platos tradicionales con un toque contemporáneo, como los buñuelos de espinaca y el revuelto gramajo.