Liudmila Zavada, de nacionalidad rusa, apareció sin vida en una ruta de España. La apodaron por la ropa que llevaba puesta. Dos décadas más tarde, Interpol logró restituirle la identidad. Navegación de entradas “Quien fuere el desgraciado…” Horóscopo de hoy, domingo 28 de septiembre: las predicciones para la salud, el amor y el dinero