Existía en Suiza un culto a los canes manifestado en la “extensión” de la vida: solían llevarlos a una exposición permanente: embalsamados o en una caja de huesos.
Existía en Suiza un culto a los canes manifestado en la “extensión” de la vida: solían llevarlos a una exposición permanente: embalsamados o en una caja de huesos.